Este estilo se adapta perfectamente a las casas de campo, aunque también es frecuente encontrarlo en viviendas urbanas, que se van sumando a esta tendencia con el fin de trasladar el espíritu campestre a cada rincón del hogar.
‘Farmhouse’, más que un estilo rústico
Aunque esta tendencia ha venido directamente del campo, no es un estilo rústico al uso, ya que posee grandes toques de delicadeza, sofisticación y luz. Da como resultado un ambiente ‘hogareño’ en el que apetece pasar las largas tardes de verano. Este nuevo estilo hace uso de materiales como la madera o las fibras, incluso la combinación de ambos, que hacen una pareja diez.
Uno de los trucos para actualizar el estilo granja, es incluir muebles de línea más actual y sencilla y decorar con textiles para lograr ambientes cálidos y confortables, preferiblemente de lino, algodón o lana.
La importancia de los textiles en el estilo ‘farmhouse’
El estilo ‘farmhouse’ es un ejemplo de cómo, con el uso de alfombras de diseños más actuales o rústicas, pueden ayudar a conseguir ese ambiente campestre actualizado que comentamos.
Los kilims, por ejemplo, son alfombras hechas en un tejido plano, sin pelo anudado. Están tejidos con hilos de lana, con las urdimbres y tramas de la alfombra normalmente de algodón y a veces de lana, y se adaptarían perfectamente al estilo rústico ‘chic’ que buscamos. Los kilims suelen presentar estampados geométricos de vivos colores que nos ayudarán a incluir este toque de luz tan favorecedor en esta época del año. Además podemos combinarlos con cojines hechos de kilim, colocados tanto en los sofás y sillones como en el suelo.
Además de los kilims, en este estilo decorativo también encajan perfectamente las alfombras persas más rústicas, como pueden ser los Gabbeh, las alfombras Shiraz o las Gashgai, que aportan colorido al ambiente sin perder el aire ‘farmhouse’ que estamos contemplando. Son anudadas artesanalmente y su textura es más gruesa y mullida que los kilim, lo que quizá aporte más calidez a la pisada.
Alfombras Yasmina, ¿quiénes somos?
Alfombras Yasmina es una empresa que nació en la capital aragonesa en 1970. Su fundador, Fernando Chavarría González, pionero del sector en Aragón, se dedicó a la importación y venta directa de las genuinas Alfombras Persas y Orientales. Fue en 2006 cuando su mujer, Mª Jesús de Lorenzo, toma el testigo y queda al frente del negocio, manteniendo intacta la filosofía de la empresa: artículos de calidad, ofreciendo siempre una buena atención y el mejor servicio a los clientes.